Levante, 28/10/2002

Más de 3.000 personas iniciaron ayer las pruebas para cubrir 1.000 vacantes

Dos de cada tres médicos interinos se quedarán sin plaza

Tres mil médicos interinos iniciaron ayer las pruebas para cubrir las 1.000 plazas fijas que ha convocado la Conselleria de Sanidad. Hacía más de 13 años que no se convocaba un proceso similar.

J. L. Lluesma, Valencia

Las oposiciones convocadas para cubrir 1.000 plazas de médico de diversas especialidades se iniciaron ayer en el campus de Tarongers de la Universitat, con la realización del primer ejercicio consistente en la elaboración de una memoria.

La mayoría de los 3.000 aspirantes a las plazas son trabajadores interinos de la sanidad pública que acudía con el objetivo de consolidar su empleo, después de 13 años sin que se convocaran oposiciones. No obstante, dos de cada tres médicos interinos se quedará sin plaza.

El proceso ha sido impulsado por el Ministerio de Sanidad -y convocado en el caso de la Comunidad Valenciana por la conselleria- con el objetivo de terminar con la inestabilidad laboral que afecta a un 42 por ciento de los facultativos del Sistema Nacional de Salud.

El primer ejercicio realizado ayer consistió en una memoria en la que se debía incluir un análisis detallado de las funciones que se deben desarrollar en la especialidad a la que se opta; la determinación de los conocimientos y medios necesarios para su desempeño; nivel de responsabilidad e importancia que las funciones que hayan de desempeñarse tengan en la organización.

Uno de los aspirantes a las 1.000 plazas fijas es el subsecretario de la Agencia Valenciana para la Salud, Marciano Gómez, actualmente médico interino, que será evaluado por el tribunal formado por inspectores y facultativos subordinados suyos.

No obstante, tal y como se recoge en el acuerdo del tribunal, «el ejercicio es de carácter anónimo, por lo que no se podrá dejar ninguna señal identificativa, marca, firma o cualquier signo que conduzca a la identificación del aspirante en las hojas de realización del ejercicio», ya que su incumplimiento «conllevará la no corrección del ejercicio».

La segunda fase del proceso consistirá en la valoración de los méritos alegados por los aspirantes, donde se primará fundamentalmente la antigüedad o los trabajos publicados.

Los aspirantes que superen la oposición sólo podrán solicitar una plaza, aunque a diferencia de otras comunidades, la conselleria de Sanidad todavía no ha hecho públicos cuáles serán los destinos de las plazas de cada especialidad.


«Un coladero de enchufados»

La convocatoria de la Oferta Pública de Empleo (OPE) extraordinaria de la Conselleria de Sanidad suscitó desde el primer momento numerosas críticas. Por un lado, los sindicatos consideraban que el proceso podía convertirse en un «coladero de enchufados» o en una puerta de acceso a un empleo fijo de interinos con cargo, allegados, familiares y contratados por el punto 1.4, según denunciaron....

Además, los cerca de 300 médicos especialistas que ya disponen de una plaza, aunque lejos de sus ciudades de origen y pretenden elegir un destino más próximo, deben renunciar al puesto del que disponen para formar parte del proceso, debido a que la conselleria no ha realizado un concurso de traslado previo a la convocatoria. Esto implica que la plaza que pueden conseguir esté todavía más lejos.